Tommaso di ser Giovanni di Mone Cassai
Tommaso di ser Giovanni di Mone Cassai, más conocido como Masaccio. Pintor italiano del primer renacimiento, o Quattrocento. Considerado el primer pintor de esta época. Formó parte del grupo de Donatello y Brunelleschi.
Nació el 21 de diciembre de 1401. Murió muy joven, a los 26 años, en 1428. De su mano se consideran obras como un fresco en Santa María Novella; una tabla con Santa Ana; La Virgen y el Niño y ángeles, en la Galería de los Uffizi, otra en Nápoles con una Crucifixión, y pocas cosas más, entre ellas restos de frescos en San Clemente, en Roma. En estas obras es evidente su colorismo vivaz. Ya al final de su vida, en sus últimas obras, se nota su estudio en el claroscuro y la utilización de las medias tintas, lo que le permite definir cuerpos en el espacio.
Sus frescos de la capilla Brancacci de la iglesia del Carmine, de Florencia, realizados en 1428, año de su muerte, considerados como su obra más importante, y se han mantenidos intactos.
La impresión que causan los frescos de Masaccio a primera vista es casi una decepción: las figuras famosas de Adan y Eva expulsados del Paraíso, con sus cuerpos desnudos, están regularmente pintadas en escorzo, y tan justamente coloridas, que no nos sorprenden acostumbrados como estamos a la corrección de las escuelas del renacimiento.
Masaccio fija con la pintura sus propios fantasmas interiores, y así se libera de su profunda conciencia de la tragedia del hombre, necesariamente mortal, pero cuyas creaciones espirituales son eternas. Esta terrible contradicción la resuelve Masaccio con una serenidad impresionante: transformando el cuerpo humano en un monumento para el espíritu. Quizá sólo los antiguos escultores egipcios, tres mil años antes y por caminos muy distintos, habían alcanzado tal grado de penetración en las relaciones entre cuerpo y espíritu.
Las figuras de Masaccio se mueven en un escenario natural. Los fondos tienen edificios en perspectivas, que sólo por el estilo de las construcciones reconocemos como de principio del siglo XV, pues por su correcto dibujo parecen de fechas posteriores.
